Nace en a los márgenes del camino de Caravaca y adquiere importancia con la construcción de la Ermita del Niño de Mula y su creciente devoción durante el siglo XVIII.
La imagen del niño es de 1940 y se guarda en la ermita que es enteramente barroca. En su exterior se anuncia por los dos campanarios que flanquean la fachada, y al interior posee una caprichosa decoración a base de rocallas y yeserías.
Día 8 de Septiembre. “la Bajada”. La tarde de este día la imagen del Niño abandona la ermita para bajar acompañado de la multitud hasta Mula
Día 22 de Septiembre. “La Romería” Por la mañana temprano el Niño sale del Convento de la Encarnación acompañado por los romeros hasta su ermita. Tras la romería la multitud se reparte por las diferentes zonas de la pedanía para comer y volver al atardecer a Mula.
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